Escríbelo. Súbelo. Capta. Comparte. Y espera la reacción.
Los usuarios cada vez más queremos contenido de verdad, de calidad. Que nos interese, que nos toque y nos haga reflexionar, o si no, al menos, divertirnos un poco.
Estamos en una era de infoxicación en la que recibimos una gran cantidad de contenidos y por muchos canales. Eso implica muchas veces leer o ¡hasta compartir! contenido que realmente es basura o que no vamos a retener.
Estamos en la era del todo o nada. En el mundo online es muy fácil triunfar, pero también es muy fácil perder. Perder credibilidad. Perder lectores. Perder seguidores. Para evitar llegar a eso debemos lucirnos con el contenido. Hacer que interese, que llegue, que cale (pero, sobre todo, que sea veraz).
Por eso, lo mejor es tener presente algunas pautas a seguir:
- No a los textos infinitos. Los rollos interminables que nadie se acaba leyendo. Menos es más, siempre. (Solo hay una «Historia Interminable» que mola).
- Apoyo gráfico. Claro que sí, las imágenes, infografías o vídeos hacen nuestro contenido mucho más atractivo.
- Sé creativo
- Usa keywords, negritas, títulos y links
- Sé transparente
- No solo publiques, ¡comparte!
- La calidad y la cantidad están a la par.
- Identifícate con tus lectores.
Con el marketing queremos vender. Y punto. Tenemos que saber los objetivos de marketing que perseguimos y exprimir al máximo nuestro content para que, cuando salga a luz, impresione e interese. Si se retiene, es bueno. Si gusta, es bueno.
¿Hemos captado tu atención? ¿Estamos haciendo un buen marketing de contenidos?
Por eso, si escribes, hazlo bien, hazlo a conciencia.