Dícese del… Nah, es broma. No queremos crear un diccionario de Marketing al uso, no somos María Moliner -ni podríamos estar a su altura. Pero sí queremos ser útiles, porque por algún motivo has acabado aquí, ¿no? Queremos acercar el léxico más destacado del Marketing Digital a cualquier lector, y si podemos sazonar nuestras acepciones con algún consejo, mejor que mejor.

INFLUENCIADORES

Dulceida, Laura Escanes, Gigi Vives…Todos conocemos estos nombres y todos sabemos de qué -no como en las clases de historia, que los nombres nos sonaban, pero no acabábamos de situar a Otto Von Bismarck o Francisco Pizarro.

El mundo influenciador nació en el universo blogger, pero ahora tiene su reinado claro en Instagram. Personas que concentran comunidades de 100k, 200k, hablando de moda, de lifestyle y de su día a día.

Gracias a que es un fenómeno con unos años de evolución, existen ya diferentes categorías de influenciadores. Así, se pueden distinguir por su tamaño: celebrities, social media influencers o microinfluencers. Hay otros autores que distinguen por su status: celebrities, comunicadores, líderes de opinión, explotadores o consumidores. También se categorizan según el sector: moda, viajes, maquillaje, fitness, videojuegos…

Como marca, el influenciador debe tener un papel relevante dentro de la estrategia de marketing digital. El objetivo perseguido suele ser notoriedad de marca, dar a conocer un nuevo producto, aumento de la comunidad en redes, entre otros.

Como en cualquier acción de marketing digital, se debe partir de un “por qué”, tener un “cómo” creativo y estratégico y un “ahora qué” basado en la analítica

La planificación de la acción con influenciadores incluyen una serie de fases, todas ellas igualmente relevantes. Así, tenemos la decisión del objetivo a conseguir, la realización de un presupuesto reservado para esta acción, la búsqueda de personas más relevantes según presupuesto y objetivo y la decisión de KPIs a analizar (previamente a la acción). Tras esto, el contacto con los influenciadores escogidos y el detalle de la acción a realizar. Y, finalmente, la monitorización de las métricas y el análisis de los resultados.

Es importante tener en cuenta que hay un gran trabajo previo a la propia acción con el influenciador. Por eso, no es recomendable contactar con aquellas personas que se pongan directamente en contacto con la marca sin haber analizado su perfil previamente. Se debe tener en cuenta que hay gente que compra seguidores, comentarios, que están dentro de “engagement pods” (comunidades que se comentan entre sí), que pueden estar llevando a cabo una estrategia pagada o que solo crean contenido sorteando productos de marcas de todo tipo.

Sea como sea, como en cualquier acción de marketing digital, se debe partir de un “por qué”, tener un “cómo” creativo y estratégico y un “ahora qué” basado en la analítica.